RECICLAJE AL PODER

Esta semana ha sido complicada: el trabajo, los exámenes...de mis hijos, mi clase de punto con esa pedazo profe.., pero el solecito también hace de las suyas,  ( por cierto, ¡¡bienvenida Señora Primavera!! ) ,y en los ratos libres, apetece más estar en la calle recargándose de vitamina D, que en casa cosiendo, sobre todo después del invierno.

El reciclaje funcional me parece un mundo fascinante pero en mi caso, es un poco utópico: estaría reciclando continuamente, desde una lata de atún a un calcetín, el problema llega cuando quiero hacer algo con esa cosa vieja que anda por casa, nunca le encuentro "su momento" ni la idea guay de la revista de moda...

Tengo un montón de ropa agazapada esperando en una cómoda a que le de nueva vida, y algún día, desde aquí les prometo que lo haré, entre tanto, a unos viejos pantalones les ha tocado la hora.

Necesitaba un neceser para juntar mis aparejos de punto, hasta ahora los llevaba en mi funda de ganchillos y agujas laneras, pero el bolsillo que le hice se quedó pequeño a si que surgió un nuevo proyecto.

Además, recientemente había comprado un libro en un centro comercial, con patrones de bolsos y bolsas que tenía muchas ganas de estrenar, y qué mejor momento para echar mano de él.

Lo primero que hice fue calcar los patrones y recortar las plantillas, súper fácil.

Después destripé el pantalón vaquero, corté las costuras y utilicé la tela necesaria para cubrir los patrones. Los pantalones eran míos, y a pesar de que tengo muchos otros de mis hijos, elegí éstos porque les tenía cariño, la verdad; eran muy cómodos y viajé mucho con ellos puestos... me traían buenos recuerdos.

Para el forro opté por una telita de flores de fabricación nacional, la tenía escondida debajo de unas japonesas importadas, preciosas, ( ya te las enseñaré agún día ), y acerté con la elección, le da mucha vida al neceser.

Y te preguntarás..¿ qué es esa cosa negra que bordea la solapa?, pues caucho. ¿ No hablábamos de reciclar?, ( se que a mi prima Lara le va a encantar ) ..., pues eso, tenía un trozo desperdigado en un cajón y lo utilicé para reforzar el bies pegándolo con pegamento especial para textil y pvc.

¡¡ Mira qué chulo quedó !!. Y como me pareció que necesitaba un poco de vidilla, pues le añadí un floripondio con cintas de colores. También lo hice yo, doblando y cosiendo las tiras y pegando un botón, también reciclado.

El resultado, ya lo has visto al principio y espero que te haya gustado. Te animo a que le des una segunda oportunidad a ese vestido que te queda pequeño, o a esa falda con la costura rota, muchas veces compramos y compramos, cuando realmente no hace falta.

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¡¡Gracias por leerme!!

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